...la Biblia de Jerusalén
Proverbios 12, 14-24
14 Por el fruto de su boca, se harta de bien el hombre, cada cual recibe
el salario de sus obras.
15 El necio tiene por recto su camino, pero el sabio escucha los
consejos.
16 El necio, al momento descubre su pena, el prudente oculta la
ignominia.
17 Quien declara la verdad, descubre la justicia; el testigo mentiroso,
la falsedad.
18 Quien habla sin tino, hiere como espada; mas la lengua de los
sabios cura.
19 Los labios sinceros permanecen por siempre, la lengua mentirosa
dura un instante.
20 Fraude en el corazón de quien trama el mal; gozo para los que
aconsejan paz.
21 Ninguna desgracia le sucede al justo, pero los malos están llenos de
miserias.
22 Los labios mentirosos abomina Yahveh; los que practican la verdad
alcanzan su favor.
23 El hombre cauto oculta su ciencia, el corazón del insensato
proclama su necedad.
24 La mano diligente obtiene el mando; la flojedad acaba en trabajos
forzados.