...la Biblia de Jerusalén
Proverbios 20, 12-23
12 El oído que oye y el ojo que ve; ambas cosas las hizo Yahveh.
13 No ames el sueño, para no hacerte pobre; ten abiertos los ojos y te
hartarás de pan.
14 «¡Malo, malo!» dice el comprador, pero al marchar se felicita.
15 Hay oro y numerosas perlas, pero los labios instruidos son la cosa
más preciosa.
16 Tómale su vestido, pues salió fiador de otro; tómale prenda por los
extraños.
17 El pan de fraude le es dulce al hombre, pero luego la boca se llena
de grava.
18 Los proyectos con el consejo se afianzan: haz con táctica la guerra.
19 El que anda murmurando descubre secretos; no andes con quien
tiene la lengua suelta.
20 Al que maldice a su padre y a su madre, se le extinguirá su lámpara
en medio de tinieblas.
21 Herencia adquirida al principio con presteza, no será a la postre
bendecida.
22 No digas: «Voy a devolver el mal»; confía en Yahveh, que te
salvará.
bien.
23 Tener dos pesas lo abomina Yahveh; tener balanzas falsas no está