...la Biblia de Jerusalén
Proverbios 21, 17-27
17 Se arruina el hombre que ama el placer, no será rico el aficionado a
banquetes.
18 Rescate del justo es el malo, y en lugar de los rectos, el traidor.
19 Mejor es habitar en el desierto que con mujer litigiosa y triste.
20 Tesoro precioso y aceite en la casa del sabio, pero el hombre necio
los devora.
21 Quien va tras la justicia y el amor hallará vida, justicia y honor.
22 El sabio escala la ciudad de los fuertes, y derriba la fortaleza en que
confiaban.
23 El que guarda su boca y su lengua, guarda su alma de la angustia.
24 Al insolente y altivo se le llama: «arrogante»; actúa en el exceso de
su insolencia.
25 El deseo del perezoso le lleva a la muerte, porque sus manos
rehúsan el trabajo.
26 Todo el día está el malo codicioso; pero el justo da sin rehusar
jamás.
27 El sacrificio de los malos es abominable, sobre todo si se ofrece
con mala intención.