...la Biblia de Jerusalén
Proverbios 27, 18-26
18 El que vigila una higuera come de su fruto, el que guarda a su
señor será honrado.
19 Como en el agua un rostro refleja otro rostro, así el corazón de un
hombre refleja el de otro hombre.
20 Seol y Perdición son insaciables; tampoco se sacian los ojos del
hombre.
21 Crisol para la plata, horno para el oro, el hombre vale según su
reputación.
22 Aunque machaques al necio en el mortero, (entre el grano, con el
pilón) no se apartará de él su necedad.
23 Conoce a fondo el estado de tu ganado, aplica tu corazón a tu
rebaño;
24 porque no es eterna la riqueza, no se transmite una corona de edad
en edad.
25 Cortada la hierba, aparecido el retoño, y apilado el heno de los
montes,
26 ten corderos para poderte vestir, machos cabríos con que pagar un
campo,