...la Biblia de Jerusalén
Proverbios 29, 17-22
17 Corrige a tu hijo y te dejará tranquilo; y hará las delicias de
tu
alma.
18 Cuando no hay visiones, el pueblo se relaja, pero el que guarda la
ley es dichoso.
19 No se corrige a un siervo con palabras, porque aunque las entienda,
no las cumple.
20 ¿Has visto un hombre dispuesto siempre a hablar? más se puede
esperar de un necio que de él.
21 Si se mima a un esclavo desde niño, al final será un ingrato.
22 El hombre violento provoca querellas, el hombre airado multiplica
los delitos.