...la Biblia de Jerusalén
Proverbios 30, 8-28
8 Aleja de mí la mentira y la palabra engañosa; no me des pobreza ni
riqueza, déjame gustar mi bocado de pan,
9 no sea que llegue a hartarme y reniegue, y diga: «¿Quién es
Yahveh?». o no sea que, siendo pobre, me dé al robo, e injurie el nombre de
mi Dios.
10 No calumnies a un siervo ante su amo no sea que te maldiga y
tengas que pagar la pena.
11 Hay gente que maldice a su padre, y a su madre no bendice,
12 gente que se cree pura y no está limpia de su mancha,
13 ¡gente de qué altivos ojos, cuyos párpados se alzan!;
14 gente cuyos dientes son espadas, y sus mandíbulas cuchillos, para
devorar a los desvalidos echándolos del país y a los pobres de
entre los
hombres.
15 La sanguijuela tiene dos hijas: «¡Daca, daca!» Hay tres cosas
insaciables y cuatro que no dicen: «¡Basta!»
16 El seol, el seno estéril, la tierra que no se sacia de agua, y el fuego
que no dice: «¡Basta!»
17 Al ojo que se ríe del padre y desprecia la obediencia de una madre,
lo picotearán los cuervos del torrente, los aguiluchos lo devorarán.
18 Tres cosas hay que me desbordan y cuatro que no conozco:
19 el camino del águila en el cielo, el camino de la serpiente por
la
roca, el camino del navío en alta mar, el camino del hombre en la doncella.
20 Este es el camino de la mujer adúltera: come, se limpia la boca y
dice: «¡No he hecho nada de malo ¡»
21 Por tres cosas tiembla la tierra y cuatro no puede soportar:
22 Por esclavo que llega a rey, por idiota que se ahíta de comer,
23 por mujer odiada que se casa, por esclava que hereda a su señora.
24 Hay cuatro seres los más pequeños de la tierra, pero que son más
sabios que los sabios:
25 las hormigas - multitud sin fuerza - que preparan en verano su
alimento;
26 los damanes - multitud sin poder -, que ponen sus casas en la roca;
27 las langostas, que sin tener rey, salen todas en orden;
28 el lagarto, al que se agarra con la mano y está en los palacios de los
reyes.