2 ¡No, hijo mío, no, hijo de mis entrañas! ¡No, hijo de mis votos!
3 No entregues tu vigor a las mujeres, ni tus caminos a las que pierden
a los reyes.
4 No es para los reyes, Lemuel, no es para los reyes beber vino,
ni
para los príncipes ser aficionado a la bebida.
5 No sea que, bebiendo, olviden sus decretos y perviertan las causas
de todos los desvalidos.
6 Dad bebidas fuertes al que va a perecer y vino al de alma amargada;
7 que beba y olvide su miseria, y no se acuerde ya de su desgracia.
8 Abre tu boca en favor del mudo, por la causa de todos los
abandonados,
9 abre tu boca, juzga con justicia y defiende la causa del mísero y del
pobre.
10 = Alef. = Una mujer completa, ¿quién la encontrará? Es mucho
más valiosa que las perlas.
11 = Bet. = En ella confía el corazón de su marido, y no será sin
provecho.
12 = Guímel. = Le produce el bien, no el mal, todos los días de
su
vida.
13 = Dálet. = Se busca lana y lino y lo trabaja con manos diligentes.
14 = He. = Es como nave de mercader que de lejos trae su provisión.
15 = Vau. = Se levanta cuando aún es de noche da de comer a sus
domésticos y órdenes a su servidumbre.
16 = Zain. = Hace cálculos sobre un campo y lo compra; con el fruto
de sus manos planta una viña.
17 = Jet. = Se ciñe con fuerza sus lomos y vigoriza sus brazos.
18 = Tet. = Siente que va bien su trabajo, no se apaga por la noche su
lámpara.
19 = Tod. = Echa mano a la rueca, sus palmas toman el huso.
20 = Kaf. = Alarga su palma al desvalido, y tiende sus manos al pobre.
21 = Lámed. = No teme por su casa a la nieve, pues todos los suyos