...la Biblia de Jerusalén
Proverbios 8, 32-34
32 «Ahora pues, hijos, escuchadme, dichosos los que guardan mis
caminos.
33 Escuchad la instrucción y haceos sabios, no la despreciéis.
34 Dichoso el hombre que me escucha velando ante mi puerta cada
día, guardando las jambas de mi entrada.