...la Biblia de Jerusalén
Romanos 3, 11-18
11 = No hay un sensato, no hay quien busque a Dios. =
12 = Todos se desviaron, a una se corrompieron; no hay quien obre el
bien, no hay siquiera uno. =
13 = Sepulcro abierto es su garganta, con su lengua urden engaños.
Veneno de áspides bajo sus labios; =
14 = maldición y amargura rebosa su boca. =
15 = Ligeros sus pies para derramar sangre; =
16 = ruina y miseria son sus caminos. =
17 = El camino de la paz no lo conocieron, =
18 = no hay temor de Dios ante sus ojos. =