4 Al que trabaja no se le cuenta el salario como favor sino como
deuda;
5 en cambio, al que, sin trabajar, cree en aquel que justifica al impío,
su fe se le reputa como justicia.
6 Como también David proclama bienaventurado al hombre a quien
Dios imputa la justicia independientemente de las obras:
7 = Bienaventurados aquellos cuyas maldades fueron perdonadas, y
cubiertos sus pecados. =
8 = Dichoso el hombre a quien el Señor no imputa culpa alguna. =
9 Entonces, ¿esta dicha recae sólo sobre los circuncisos o también
sobre los incircuncisos? Decimos, en efecto, que = la fe de Abraham le fue
reputada como justicia. =
10 Y ¿cómo le fue reputada? ¿siendo él circunciso o antes de serlo?
No siendo circunciso sino antes;
11 y = recibió la señal de la circuncisión = como sello de la justicia de
la fe que poseía siendo incircunciso. Así se convertía en padre de todos los
creyentes incircuncisos, a fin de que la justicia les fuera igualmente
imputada;
12 y en padre también de los circuncisos que no se contentan con la
circuncisión, sino que siguen además las huellas de la fe que tuvo nuestro
padre Abraham antes de la circuncisión.