23 Con sus ritos infanticidas, sus misterios secretos, sus delirantes
orgías de costumbres extravagantes,
24 ni sus vidas ni sus matrimonios conservan ya puros. Uno elimina a
otro a traición o le aflige dándole bastardos;
25 por doquiera, en confusión, sangre y muerte, robo y fraude,
corrupción, deslealtad, agitación, perjurio,
26 trastorno del bien, olvido de la gratitud, inmundicia en las almas,
inversión en los sexos, matrimonios libres, adulterios, libertinaje.
27 Que es culto de los ídolos sin nombre principio, causa y término
de todos los males.
28 Porque o se divierten alocadamente, o manifiestan oráculos falsos,
o viven una vida de injusticia, o con toda facilidad perjuran:
29 como los ídolos en que confían no tienen vida, no esperan que del
perjurio se les siga algún mal.
30 Una justa sanción les alcanzará, sin embargo, por doble motivo:
por formarse de Dios una idea falsa al darse a los ídolos y por
jurar
injustamente contra la verdad con desprecio de toda santidad.