1 Grandes son en verdad tus juicios e inenarrables, por donde almas
ignorantes se vinieron a engañar.
2 Imaginaban los impíos que podrían oprimir a una nación santa; y se
encontraron prisioneros de tinieblas, en larga noche trabados, recluidos en
sus casas, desterrados de la Providencia eterna.