7 Se vio una nube proteger con su sombra el campamento, emerger
del agua que la cubría una tierra enjuta, del mar Rojo un camino expedito,
una verde llanura del oleaje impetuoso,
8 por donde, formando un solo pueblo, pasaron los que tu mano
protegía mientras contemplaban tan admirables prodigios.
9 Como caballos se apacentaban, y retozaban como corderos
alabándote a ti, Señor que los habías liberado.