...la Biblia de Jerusalén
Sabiduría 5, 12-13
12 como flecha disparada al blanco; el aire hendido refluye al instante
sobre sí y no sabe el camino que la flecha siguió.
13 Lo mismo nosotros: apenas nacidos, dejamos de existir, y no
podemos mostrar vestigio alguno de virtud; nos gastamos en
nuestra
maldad.»