16 Vuelto a casa, junto a ella descansaré, pues no causa amargura su
compañía ni tristeza la convivencia con ella, sino satisfacción y alegría».
17 Pensando esto conmigo mismo y considerando en mi corazón que
se encuentra la inmortalidad en emparentar con la Sabiduría,
18 en su amistad un placer bueno, en los trabajos de sus manos
inagotables riquezas, prudencia en cultivar su trato y prestigio en conversar
con ella, por todos los medios buscaba la manera de hacérmela mía.