Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Salmo 102, 11-23

11 (12) mis días son como la sombra que declina, y yo me seco como
el heno.

12 (13) Mas tú, Yahveh, permaneces para siempre, y tu memoria de
edad en edad.

13 (14) Tú te alzarás, compadecido de Sión, pues es ya tiempo de
apiadarte de ella, ha llegado la hora;

14 (15) que están tus siervos encariñados de sus piedras y se
compadecen de sus ruinas.

15 (16) Y temerán las naciones el nombre de Yahveh, y todos los
reyes de la tierra tu gloria;

16 (17) cuando Yahveh reconstruya a Sión, y aparezca en su gloria,

17 (18) volverá su rostro a la oración del despojado, su oración no
despreciará.

18 (19) Se escribirá esto para la edad futura, y en pueblo renovado
alabará a Yahveh:

19 (20) que se ha inclinado Yahveh desde su altura santa, desde los
cielos ha mirado a la tierra,

20 (21) para oír el suspiro del cautivo, para librar a los hijos
de la
muerte.

21 (22) Para pregonar en Sión el nombre de Yahveh, y su alabanza en
Jerusalén,

22 (23) cuando a una se congreguen los pueblos, y los reinos para
servir a Yahveh.

23 (24) El ha enervado mi fuerza en el camino, ha abreviado mis días.