...la Biblia de Jerusalén
Salmo 107, 9-20
9 Porque él sació el alma anhelante, el alma hambrienta saturó de
bienes.
10 Habitantes de tiniebla y sombra, cautivos de la miseria y de los
hierros,
11 por haber sido rebeldes a las órdenes de Dios y haber despreciado
el consejo del Altísimo,
12 él sometió su corazón a la fatiga, sucumbían, y no había quien
socorriera.
13 Y hacia Yahveh gritaron en su apuro, y él los salvó de sus
angustias,
14 los sacó de la tiniebla y de la sombra, y rompió sus cadenas.
15 ¡Den gracias a Yahveh por su amor, por sus prodigios con los hijos
de Adán!
16 Pues las puertas de bronce quebrantó, y los barrotes de hierro hizo
pedazos.
17 Embotados de resultas de sus yerros, miserables a causa de sus
culpas,
18 todo manjar les daba náusea, tocaban ya a las puertas de la muerte.
19 Y hacia Yahveh gritaron en su apuro, y él los salvó de sus
angustias;
20 su palabra envió para sanarlos y arrancar sus vidas de la fosa.