...la Biblia de Jerusalén
Salmo 119, 139-143
139 Mi celo me consume, porque mis adversarios olvidan tus
palabras.
140 Acendrada en extremo es tu promesa, tu servidor la ama.
141 Pequeño soy y despreciado, mas no olvido tus ordenanzas.
142 Justicia eterna es tu justicia, verdad tu ley.
143 Angustia y opresión me han alcanzado, tus mandamientos hacen
mis delicias.