Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Salmo 22, 5-8

5 (6) a ti clamaron, y salieron salvos, en ti esperaron, y nunca
quedaron confundidos.

6 (7) Y yo, gusano, que no hombre, vergüenza del vulgo, asco del
pueblo,

7 (8) todos los que me ven de mí se mofan, tuercen los labios,
menean la cabeza:

8 (9) «Se confió a Yahveh, ¡pues que él le libre, que le salve, puesto
que le ama!»