...la Biblia de Jerusalén
Salmo 44, 18-22
18 (19) ¡No habían vuelto atrás nuestros corazones, ni habían dejado
nuestros pasos tu sendero,
19 (20) para que tú nos aplastaras en morada de chacales, y nos
cubrieras con la sombra de la muerte!
20 (21) Si hubiésemos olvidado el nombre de nuestro Dios o alzado
nuestras manos hacia un dios extranjero,
21 (22) ¿no se habría dado cuenta Dios, él, que del corazón conoce los
secretos?
22 (23) Pero por ti se nos mata cada día, como ovejas de matadero se
nos trata.