...la Biblia de Jerusalén
Salmo 44, 21-26
21 (22) ¿no se habría dado cuenta Dios, él, que del corazón conoce los
secretos?
22 (23) Pero por ti se nos mata cada día, como ovejas de matadero se
nos trata.
23 (24) ¡Despierta ya! ¿Por qué duermes, Señor? ¡Levántate, no
rechaces para siempre!
24 (25) ¿Por qué ocultas tu rostro, olvidas nuestra opresión, nuestra
miseria?
25 (26) Pues nuestra alma está hundida en el polvo, pegado a la tierra
nuestro vientre.
26 (27) ¡Alzate, ven en nuestra ayuda, rescátanos por tu amor!