...la Biblia de Jerusalén
Salmo 5, 8-12
8 (9) Guíame, Yahveh, en tu justicia, por causa de los que me acechan,
allana tu camino ante mí.
9 (10) Que no hay en su boca lealtad, en su interior, tan sólo
subversión; sepulcro abierto es su garganta, melosa muévese su lengua.
10 (11) Trátalos, oh Dios, como culpables, haz que fracasen sus
intrigas; arrójalos por el exceso de sus crímenes, por rebelarse contra ti.
11 (12) Y se alegren los que a ti se acogen, se alborocen por siempre;
tú los proteges, en ti exultan los que aman tu nombre.
12 (13) Pues tú bendices al justo, Yahveh, como un gran escudo tu
favor le cubre.