...la Biblia de Jerusalén
Salmo 51, 16-18
16 (18) Pues no te agrada el sacrificio, si ofrezco un holocausto no lo
aceptas.
17 (19) El sacrificio a Dios es un espíritu contrito; un corazón contrito
y humillado, oh Dios, no lo desprecias.
18 (20) ¡Favorece a Sión en tu benevolencia, reconstruye las murallas
de Jerusalén!