...la Biblia de Jerusalén
Salmo 53, 1-2
1 (2) Dice en su corazón el insensato: «¡No hay Dios!» Corrompidos
están, de conducta abominable, no hay quien haga el bien.
2 (3) Se asoma Dios desde los cielos hacia los hijos de Adán, por ver
si hay un sensato, alguien que busque a Dios.