...la Biblia de Jerusalén
Salmo 56, 5-10
5 (6) Todo el día retuercen mis palabras, todos sus pensamientos son
de hacerme mal;
6 (7) se conjuran, se ocultan, mis pisadas observan, como para atrapar
mi alma.
7 (8) Por su iniquidad, ¿habrá escape para ellos? ¡Abate, oh Dios, a
los pueblos en tu cólera!
8 (9) De mi vida errante llevas tú la cuenta, ¡recoge mis lágrimas en
tu odre!
9 (10) Entonces retrocederán mis enemigos, el día en que yo clame.
Yo sé que Dios está por mí.
10 (11) En Dios, cuya palabra alabo, en Yahveh, cuya palabra alabo,