...la Biblia de Jerusalén
Salmo 59, 6-12
6 (7) Regresan a la tarde, aúllan como perros, rondan por la ciudad.
7 (8) Míralos desbarrar a boca llena, espadas en sus labios: «¿Hay
alguno que oiga?»
8 (9) Mas tú, Yahveh, te ríes de ellos, tú te mofas de todos los
gentiles.
9 (10) Oh fuerza mía, hacia ti miro. Pues es Dios mi ciudadela,
10 (11) el Dios de mi amor viene a mi encuentro. Dios me hará
desafiar a los que me asechan.
11 (12) ¡Oh, no los mates, no se olvide mi pueblo, dispérsalos con tu
poder, humíllalos, oh Señor, nuestro escudo!
12 (13) Pecado es en su boca la palabra de sus labios; ¡queden, pues,
presos en su orgullo, por la blasfemia, por la mentira que vocean!