...la Biblia de Jerusalén
Salmo 71, 10-12
10 Porque de mí mis enemigos hablan, los que espían mi alma se
conciertan:
11 «¡Dios le ha desamparado, perseguidle, apresadle, pues no hay
quien le libere!»
12 ¡Oh Dios, no te estés lejos de mí, Dios mío, ven pronto en mi
socorro!