...la Biblia de Jerusalén
Salmo 71, 4-10
4 ¡Dios mío, líbrame de la mano del impío, de las garras del perverso
y del violento!
5 Pues tú eres mi esperanza, Señor, Yahveh, mi confianza desde mi
juventud.
6 En ti tengo mi apoyo desde el seno, tú mi porción desde las entrañas
de mi madre; ¡en ti sin cesar mi alabanza!
7 Soy el asombro de muchos, mas tú eres mi seguro refugio.
8 Mi boca está repleta de tu loa, de tu gloria todo el día.
9 A la hora de mi vejez no me rechaces, no me abandones cuando
decae mi vigor.
10 Porque de mí mis enemigos hablan, los que espían mi alma se
conciertan: