...la Biblia de Jerusalén
Salmo 71, 9-11
9 A la hora de mi vejez no me rechaces, no me abandones cuando
decae mi vigor.
10 Porque de mí mis enemigos hablan, los que espían mi alma se
conciertan:
11 «¡Dios le ha desamparado, perseguidle, apresadle, pues no hay
quien le libere!»