...la Biblia de Jerusalén
Santiago 4, 12-17
12 Uno solo es el legislador y juez, que puede salvar o perder. En
cambio tú, ¿quién eres para juzgar al prójimo?
13 Ahora bien, vosotros los que decís: «Hoy o mañana iremos a tal
ciudad, pasaremos allí el año, negociaremos y ganaremos»;
14 vosotros que no sabéis qué será de vuestra vida el día de mañana...
¡Sois vapor que aparece un momento y después desaparece!
15 En lugar de decir: «Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o
aquello».
16 Pero ahora os jactáis en vuestra fanfarronería. Toda jactancia de
este tipo es mala.
17 Aquel, pues, que sabe hacer el bien y no lo hace, comete pecado.