8 He oído los insultos de Moab y los denuestos de los hijos de
Ammón, cuando insultaron a mi pueblo, y se engrandecieron a costa de su
territorio.
9 Por eso, ¡por mi vida - oráculo de Yahveh Sebaot, Dios de Israel -
que Moab quedará como Sodoma, y los habitantes de Ammón como
Gomorra: cardizal, mina de sal, desolación para siempre! El Resto de
mi
pueblo los saqueará, lo que quede de mi nación los heredará.