12 Cuando tú y Sarra hacíais oración, era yo el que presentaba y leía
ante la Gloria del Señor el memorial de vuestras peticiones. Y lo
mismo
hacía cuando enterrabas a los muertos.
13 Cuando te levantabas de la mesa sin tardanza, dejando la comida,
para esconder un cadáver, era yo enviado para someterte a prueba.
14 También ahora me ha enviado Dios para curarte a ti y a tú nuera
Sarra.
15 Yo soy Rafael, uno de los siete ángeles que están siempre
presentes y tienen entrada a la Gloria del Señor».