8 Aquel día protegerá Yahveh a los habitantes de Jerusalén: el más
flaco entre ellos será aquel día como David, y la casa de David será como
Dios, como un ángel de Yahveh, al frente de ellos.
9 Aquel día me dispondré a destruir a todas las naciones que vengan
contra Jerusalén;
10 derramaré sobre la casa de David y sobre los habitantes de
Jerusalén un espíritu de gracia y de oración; y mirarán hacia mí. En cuanto
a aquél a quien traspasaron, harán lamentación por él como lamentación por
hijo único, y le llorarán amargamente como se llora amargamente a un
primogénito.