7 Un día único será - conocido sólo de Yahveh -: no habrá día y luego
noche, sino que a la hora de la tarde habrá luz.
8 Sucederá aquel día que saldrán de Jerusalén aguas vivas, mitad hacia
el mar oriental, mitad hacia el mar occidental: las habrá tanto en
verano
como en invierno.
9 Y será Yahveh rey sobre toda la tierra: ¡el día aquel será único
Yahveh y único su nombre!
10 Toda esta tierra se tornará llanura, desde Gueba hasta Rimmón, al
sur de Jerusalén. Y ésta, encumbrada, será habitada en su lugar,
desde la
Puerta de Benjamín hasta el emplazamiento de la antigua Puerta, es decir,
hasta la Puerta de los Ángulos, y desde la torre de Jananel hasta los Lagares
del rey.
11 Se habitará en ella y no habrá más anatema: ¡Jerusalén será
habitada en seguridad!