3 Ellos dijeron: «El Dios de los hebreos se nos ha aparecido; permite,
pues, que vayamos camino de tres días al desierto para ofrecer sacrificios a
Yahveh, nuestro Dios, no sea que nos castigue con peste o espada.»
4 El rey de Egipto les replicó: «¿Por qué vosotros, Moisés y Aarón,
apartáis al pueblo de sus trabajos? Idos a vuestra tarea.»
5 Y añadió Faraón: «Ahora que el pueblo de esa región es numeroso