Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Éxodo 9, 25-33

25 El granizo hirió cuanto había en el campo en todo el país de Egipto,
desde los hombres hasta los ganados. El granizo machacó también toda la
hierba del campo, y quebró todos los árboles del campo.

26 Tan sólo en la región de Gosen, donde habitaban los israelitas, no
hubo granizo.

27 Faraón hizo llamar a Moisés y a Aarón y les dijo: «Ahora sí, he
pecado; Yahveh es el justo, y yo y mi pueblo somos inicuos.


28 Rogad a Yahveh que cesen ya los truenos y el granizo; y os dejaré
salir. No tendréis que quedaros más tiempo aquí.»

29 Moisés le respondió: «Cuando salga de la ciudad extenderé mis
manos hacia Yahveh, cesarán los truenos, y no habrá más granizo, para que
sepas que la tierra es de Yahveh.

30 Pero bien sé que ni tú ni tus siervos teméis todavía a Yahveh,
Dios.»

31 Fueron destrozados el lino y la cebada, pues la cebada estaba ya en
espiga, y el lino en flor.

32 El trigo y la espelta no fueron destrozados por ser tardíos.

33 Dejando a Faraón, salió Moisés de la ciudad, extendió las manos
hacia Yahveh, y cesaron los truenos y granizos, y no cayó más lluvia sobre
la tierra.