3 mira que la mano de Yahveh caerá sobre tus ganados del campo,
sobre los caballos, sobre los asnos, sobre los camellos, sobre la vacadas y
sobre las ovejas; habrá una grandísima peste.
4 Pero Yahveh hará distinción entre el ganado de Israel y el ganado de
los egipcios, de modo que nada perecerá de lo perteneciente a Israel.»
5 Y Yahveh fijó el plazo, diciendo: «Mañana hará esto Yahveh en el
país.»
6 Al día siguiente cumplió Yahveh su palabra y murió todo el ganado
de los egipcios; mas del ganado de los israelitas no murió ni una
sola
cabeza.
7 Faraón mandó hacer averiguaciones, y se vio que del ganado de
Israel no había muerto ni un solo animal. Sin embargo, se endureció
el
corazón de Faraón y no dejó salir al pueblo.
8 Dijo Yahveh a Moisés y a Aarón: «Tomad dos grandes puñados de
hollín de horno, y que Moisés lo lance hacia el cielo, en presencia
de
Faraón;
9 se convertirá en polvo fino sobre todo el territorio de Egipto, y
formará erupciones pustulosas, en hombres y ganados, por toda la tierra de
Egipto.»